En 1816 un grupo de amigos se encerró en un castillo e inventaron historias de terror. Ahí surgió Frankenstein, un libro que dos siglos después nos sigue invitando a la reflexión.
Por: Laura Puentes
Una de las mejores novelas de terror y ciencia-ficción de la historia es Frankenstein, o el moderno Prometeo donde se cuenta la historia de un ser creado por el doctor Víctor Frankenstein, que cobra vida a partir de un experimento con electricidad.
Esta novela fue escrita por Mary Shelley y en este 2021 está cumpliendo 203 años de su publicación.
En el siglo XVIII, en la casa del padre de Mary, el pensador William Godwin, se realizaban cenas y tertulias donde se hablaban sobre los avances de una ciencia, que por entonces aún tenía un toque mágico para la época.
A los invitados les fascinaban en particular los experimentos científicos ligados a la electricidad, como los de Luigi Galvani, el cual consistía en mover las patas de una rana mediante una descarga eléctrica.
En 1814, Mary conoció al poeta Percy B. Shelley, por entonces casado y padre de dos hijos. Ambos se enamoraron, pero desde el primer momento Godwin se opuso a la relación. Decididos a unir sus vidas, huyeron a Francia.
Mary dio a luz a una niña que tristemente moriría a las dos semanas de nacida en 1815. El 13 de marzo ella escribiría en su diario: “He soñado que mi pequeña niñita volvía a la vida; que solamente se había quedado fría, y cuando la acunábamos junto al fuego, revivía”.
En junio de 1816 un grupo de amigos se refugia del oscuro verano provocado por la erupción del volcán Tambora en la residencia del poeta Lord Byron, en los Alpes. Entre ellos los Shelley.
En esos días comienzan a leer Fantasmagoriana, una antología francesa de relatos alemanes de terror que John Polidori, doctor de los Shelley, ha traído consigo. Su lectura despierta un reto de Byron de que cada quien escribiera un relato de terror. Ése sería el germen de Frankenstein.
Kit Frankenstein
Conocer más sobre la ciencia es fascinante y luego de conocer sobre la historia de Frankenstein, es momento de hacer experimentos al puro estilo del doctor Víctor.
Frankenstein200 es un proyecto del National Informal Stem Education Net Work (NISE) en el cual podrás realizar actividades muy interesantes para examinar tecnologías emergentes como la inteligencia artificial y la ingeniería genética.
Podrás crear tu propia batería a partir de dos metales y tu propio cuerpo o también si te quieres poner creativo puedes hacer tu propia máscara de monstruos.
O ¿qué te parece crear tu propio Frankentoy, donde podrás crear “criaturas” mezclando y combinando diferentes partes de los juguetes que tienes en casa? ¿Verdad que suena muy divertido? Entra a este link y a poner manos a la obra.
La ética científica
Aunque la novela de Mary Shelley tiene más de dos siglos de existencia, aún en nuestros días nos invita a la conversación y la reflexión sobre la innovación responsable en diferentes ámbitos de la ciencia, principalmente la genética.
En diversas investigaciones se hace hincapié en la creación y modificación de organismos, en algunos casos organismos híbridos para que puedan ser portadores de órganos para humanos que necesitan un trasplante, como es el caso de los cerdos.
Aquí entran en juego dilemas importantes de la ética científica empleada para salvar vidas humanas y también de los derechos de otros seres vivos. Y en esto también se puede hablar de revivir a animales extintos y reintegrarlos a los ecosistemas. Sin embargo, también se tiene que analizar el desequilibrio ambiental que esto puede causar.
Otro tema importante es cómo dentro de la novela, Frankenstein, luego de salir a la vida, se siente solo y le pide a su creador que haga una compañera de vida. A veces es difícil aceptar las diferencias y se crea una exclusión social.
Sin duda alguna esta novela habla sobre temas que en nuestros días son dilemas éticos, científicos y hasta sociales. Así que es momento de leerla y reflexionar sobre todo lo que nos rodea y hacia dónde va nuestro mundo.
Referencias:
Frankenstein, 1816: el año que nació un monstruo (nationalgeographic.com.es)
Frankenstein y los límites éticos de la ciencia (lavanguardia.com)